![]() Comenzando a comer! Lo ideal es que la lactancia materna (LM) sea exclusiva hasta los 6 meses, una vez que el bebé estée listo para comer y a libre demanda hasta los 2 años. Cuando el bebé es prematuro o toma fórmula o tiene algún caso especial, es posible que se comience la alimentación complementaria un poco antes (siempre y cuando el bebé se pueda sentar con apoyo, pueda mantener erguida la cabeza, rechazar alimentos, etc. El pediatra te dará la luz verde en este caso). La idea es mantener la leche materna pero ir que vaya disminuyendo la cantidad que toma a medida que aumentamos los sólidos. Cuando llega al año el bebé puede comer casi como un adulto (y lo mismo que se come en casa), y tenemos que mantener esta idea para que hagamos una transición hasta este punto y no cometamos el error de que siga comiendo papilla. En realidad, en contra de lo acostumbrado, la idea es que el bebé coma cuando tiene hambre y tú aprendas con él cual horario le conviene (como con la lactancia) pero si se puede tener algunas ideas a modo de guía. También hay que considerar que no a todos les gusta la misma comida, dale variedad para que prueba de todo pero no lo fuerces. Trata de que la comida que le das comparta los mismos ingredientes que la comida que preparan en casa para el resto de la familia. Consistencia: si bien se acostumbra servir papilla, hoy en día se está redescubriendo el que el bebé coma cosas "sólidas" (baby led weaning = BLW) tema que tocaré a profundidad en otro post. La idea del BLW es darle al bebé alimentos cocidos en tamaños adecuados, la idea es que el bebé pueda coger con la mano, aprenda a masticar y luego a pasar la comida (arbolito de brócoli, zanahoria sancochada, etc.) Si le vas a dar papilla, recuerda que debe ser espesa y procura mezclar ingredientes SIN LICUARLOS Y SIN AGREGAR AZÚCAR NI SAL NI. Un truco es sacarte leche y usarla como ingrediente :) También puedes usar una cucharita de aceite vegetal para aumentar las calorías y darle mejor consistencia (agregala cruda justo antes de que la coma). Si bien, como mencioné, cada bebé es diferente, a la mayoría de las mamás les gusta tener al menos una base cuando empieza la alimentación complementaria. A continuación pondré por etapas la cantidad de comidas que podría convenir al bebé (el resto del día con leche materna o fórmula), el volumen aproximado que tiene el estómago de un bebé en esa edad (ojo que es un promedio por edad, pero puede servir para orientarte). 6 a 8 meses Leche: Materna a demanda (4 a 6 veces al día más o menos), Fórmula (4 a 5 biberones de 6 a 8 onzas, unos 178 a 237 ml). Cantidad de comidas: 1 a 3 comidas al día. Volumen del estómago: 130 –190 ml Alimentos permitidos: en realidad puede comer casi de todo, pero te recomiendo empezar con verduras que se puedan sancochar como la papa, a zanahoria, crudas como el tomate o la palta y poco a poco introduce carnes magras y cereales como arroz, maíz, quinua, harina de estos y luego frutas como el plátano y la manzana. Incorpora legumbres no trituradas a partir del 8avo mes. 9 a 12 meses: Leche: leche materna a demanda (alrededor de 3 a 5 veces al día. O bien leche de fórmula: alrededor de 4 a 5 biberones de 5 a 6 onzas (147 a 177 ml) al día. Cantidad de comidas: 3 a 5 comidas al día (al año ya deben ser 5 comidas, 3 principales) Volumen del estómago: 190 –260 ml. Espera a esta etapa para recién introducir hojas verdes oscura, pero igual qe no sea todos los días. 1 a 2 años Leche: Leche materna según lo que desee la mamá y el niño. Cantidad de comidas: 3 comidas al día + 2 meriendas. Volumen del estómago: depenbderá del niño, pero mínimo unos 200 gramos de comida + 100 gramos de fruta al día. Alimentos permitidos: ya puede comer casi todo, aunque la asociación española de pediatría recomienda demorar la leche de vaca hasta el segundo año, pero la puede tomar desde que cumple un año. Mientras más atrases los dulces mejor, lo mismo ocurre con las frituras, tés, etc. Horarios Con todo lo anterior creo que se puede entender que no hay un horrio mágico, todo dependerá del bebé. Si ya tienes un horario con la leche (materna o de formula) mantenlo; si no, empieza con una sóla comida al día y ve viendo como le va de apetito, trata de que sea en el mismo horario en el que comes para que vaya aprendiendo a comer en familia. Esto es más fácil si aplicas el BLW, ya que sientas al bebe en tu regazo mientras comes y le vas dando lo que le llama la atención. A forma de modelo puedes considerar: Desayuno (entre las 7 y las 8) + Mañana (entre las 10 y las 11) + Almuerzo (entre las 12 y las 2) + media tarde (entre las 3 y las 5) y cena (entre las 6 y las 8) Recordando que el "desayuno" y la "cena" hay tomas de leche materna o de formula y que en el intermedio puede que tome más. Este es un horario súper flexible y adaptable. Más tips: Cada vez que introduzcas un alimento, evita mezclarlo con otro, así podrás darte cuenta no sólo si le agrada el sabor, si no también si presente alguna reacción adversa. Si hay algún alimento permitido pero al que alguno o ambos padres es alérgico, es mejor retrasar su consumo. No obligues al bebé a que coma más si no quiere, tampoco lo dejes con hambre. Es mejor que empieces con las verduras y luego las frutas, así el sabor dulce de las frutas no harán que tu bebé sólo quiera comer dulce. Antes del año no se deben ofrecer jugos, y recién a los 2 años podríamos hablar de permitir 1/2 vaso diario. ![]() La leche es un excelente alimento rico en proteínas de alta calidad y calcio. Un vaso de leche (200 ml) cubre el requerimiento en calcio de un niño entre 3 y 5 años en casi 30%. Es además rica y súper versátil ya que se puede tomar sola, en batidos, en cremas, etc. Además suele venderse enriquecidas con vitamina D, pero ¿es realmente necesaria? La verdad es que no, en muchas culturas la leche ni siquiera es parte de la alimentación y no todas las personas pueden beberla ya que existen quienes son alérgicos a la proteína de la leche y quienes son intolerantes a la lactosa (el azúcar natural de la leche). En nuestro país 1 de cada 4 personas son intolerantes a la lactosa, el cuerpo es incapaz de usarla provocando cólicos, gases, nausea y diarrea; síntomas peligrosos cuando se trata de un niño pequeño ya que se puede deshidratar y desnutrir. Si nuestro niño no toma leche, puede obtener suficiente calcio al consumir otros productos lácteos como quesos o yogurt (que en mucho casos puede, inclusive, ser consumido si el niños es intolerante a la lactosa) y productos no lácteos como sardinas enlatadas, vegetales de color verde como el brócoli, almendras, avellanas, semillas de linaza, etc. Si bien contiene proteínas de buena calidad, una dieta balanceada que contenga huevo, carnes y cereales combinados con menestras, etc. debería proveer las proteínas suficientes. Si lo que te preocupa es la vitamina D, no te preocupes, la mejor fuente de vitamina D es exponerse al sol por uno 15 minutos al día ya que la vitamina se forma en nuestra piel como reacción a la luz solar. Un detalle negativo de la leche es su contenido de grasa saturada; sin embargo, un consumo moderado no debería suponer un problema y además se puede utilizar leche semi descremada. En conclusión, no es necesario que tu hijo tome leche, pero si no tiene alguna enfermedad que se lo prohíba, ésta es un alimento rico, nutritivo y práctico que puedes aprovechar; y, si no le gusta el sabor de la leche sola, siempre se puede consumir con cereales de desayuno, en batidos con frutas naturales (evitando agregar azúcar claro), en cremas de verdura, etc. ![]() Durante los primeros años se forman los principales hábitos alimentarios que perduraran toda la vida. Preparar el paladar del niño es más simple de lo que uno cree, acá 5 simples consejos: 1. Variedad. Parece el primer paso más lógico, procura que tu pequeña no coma lo mismo todos los días, varía el desayuno, almuerzo, cena y entre comidas. No tienes que complicarte, intercala los alimentos y varía la forma de cocción y procura aumentar la variedad. 2. Evita el azúcar y la sal. El paladar de los niños es más sensible y si comienzan desde pequeños a consumir sal y azúcar estás "mataran" el sabor de los alimentos y su cerebro se acondicionará a comer siempre dulce y salado. No hay necesidad de ponerle azúcar a los jugos, leche y otras bebidas y el hecho de que estés acostumbrado a comer salado no quiere decir que tus hijos tengan que aprender a comer así. 3. Minimiza el consumo de comida chatarra. No sólo es es rica en azúcar y sal, sino también en grasas saturadas que condicionan al cerebro y provocan que el niño de vuelva adicto a ésta. 4. Combina pero no mezcles. Intenta de que tus comidas principales tengan al menos 3 colores y evita mezclar todo para que tenga un sólo sabor, es mejor ir intercalando o combinando en un sólo bocado sabores que no se "eliminen" entre sí. Así el niño será capaz de reconocer sabores. 5. Que participen. Que tú pequeño te ayude con las compras y preparación de las comidas, conviértelas en momentos para compartir juntos. Recuerda que es importante que aprender a que coman variado no sólo parte desde un punto de vista nutricional (más variedad = más nutrientes) sino también desde el punto de vista social. Puedes usar la cocina para que aprenda más de su propia cultura o para que a sea más abierto a otras. Equivalencias entre comida chatarra y comida saludable: La gran diferencia está en que si bien equivalen en calorías, la gran diferencia es que la comida chatarra aporta energía vacía, sin nutrientes, mientras que la comida saludable es rica en nutrientes.
¿No se supone que comer y producir alimentos es algo natural? El hierro es un mineral esencial en la alimentación humana, stá presente en todas las células y sirve, principalmente, para transportar oxígeno y producir energía. Hierro y energía. En la sangre tenemos plasma, glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Los glóbulos rojos contienen una proteína llamada hemoglobina, la cual contiene hierro. El hierro liga el oxígeno que respiramos y lo lleva a todo el cuerpo por el torrente sanguíneo. Además de transportarlo, el hierro también participa en las reacciones que permiten que las células produzcan energía. Hierro y alimentación Si bien el hierro está distribuido en diferentes alimentos, la biodisponibilidad (qué tanto absorbe y usa nuestro cuerpo) dependerá del tipo de hierro que consumimos. Algunas veces, un producto de origen vegetal contiene más hierro que uno de origen animal, pero el primero tiene una absorcion menor y está limitado por otros componentes de la dieta. La regla más sencilla para saber si un alimento es rico en hierro, es preguntarte dos cosas: 1.¿Es rojo? Y 2. ¿Es de origen animal? 1.¿Por qué animal? Lo que sucede es que, si bien hay hierro de origen vegetal, este es hierro "no hem" y el hierro en nuestro cuerpo es hierro hem, entonces si consumimos hierro hem (de origen animal) el cuerpo puede aprovecharlo mejor y en más cantidad. Es por esto que si bien, un producto de orgine vegetal puede tener más hierro, la absorción y uso de éste es mucho más baja que el de uno de origen animal. 2.¿Por qué rojo? La hemoglobina es la que le da el color rojo a la sangre, entonces las partes del animal que contienen hierro son rojas (sangrecita, morcilla, carne). Las patas, por ejemplo, no lo son, la leche tampoco. Rompen la regla la yema de huevo y pescados como las sardinas y el atún. La recomendación es que se tenga al menos una porción al día de un alimento rico en hierro, los cuales enlisto a continuación: Alimentos ricos en hierro de origen animal: Hígado, sangrecita, morcillas, ostras*, arenque, sartdinas, pescados, yema de huevo*, carnes rojas. Alimentos ricos en hierro de origen vegetal: cacao en polvo, garbanzos, lentejas, habas, semillas y harina de trigo (ya que por ley viene enriquecida con hierro). La regla básica es no consumir alimentos ricos en hierro con: cafeína (gaseosa negra, café, té, chocolate. etc.), alimentos ricos en calcio (como la leche, queso, yogurt, etc.), fitatos y fibras (que se encuentran en verduras como espinaca) . La cafeína inhibe la absorción de hierro, el calcio se "une" al hierro y al final no aprovechas ninguno y la fibra hace que no se absorba. Estos alimentos puedes consumirlos pero no en la misma comida que el alimento rico me hierro.
Anemia Ferropénica Si la concentración de hemoglobina es baja, lo es la del hierro, y en ese caso el cuerpo no recibirá suficiente oxígeno y como consecuencia las células no serán capaces de producir energía. A este estado se le conoce como anemia ferropénica, y el síntoma más común y claro es el cansancio. Otros signos y síntomas son dificultad para respirar, mareo, dolor de cabeza, frío en las manos y los pies, palidez, dolor en el pecho, etc. Además, debido a que hay menos hemoglobina para transportar el oxígeno, el corazón debe bombear más seguido por lo que entre las complicaciones se pueden dar casos de arritmia. A la larga pueden complicarte algunos órganos por falta de oxígeno y si la persona tiene alguna enfermedad, como cáncer o sida, es más probable que tenga algún problema con el corazón. Para saber si se sufre de anemia , se toma un examen de sangre en el cual saldrá la concentración de hemoglobina, se lee como Hb y la unidad está en gramos por decilitros (g/dL). Los resultados normales varían, pero en general son:
El tratamiento es con suplementos y tener una dieta con suficientes alimentos ricos en hierro. Lee más sobre la Anemia. Hierro y embarazo (Ver Anemia en el embarazo)
Los requerimientos de hierro, mostrados en la tabla, durante el embarazo son un estimado de las necesidades mínimas en el período total de los nueve meses. En la realidad, las necesidades de hierro pueden aumentar en el segundo semestre aproximadamente cinco veces los requerimientos y en el tercer semestre aproximadamente ocho veces los requerimientos del pre-embarazo. Generalmente se necesitan suplementos para cubrir estos requerimientos además de una dieta balanceada.
La anemia suele coincidir o empeorar cuando estás embarazada pues el volumen de sangre aumenta (a partir de la 6ta semana), pero si bien el volumen de los glóbulos rojos también los hace (en un 25%), el plasma lo hace en casi el doble (40%). Entonces la concentración de glóbulos rojos en la sangre disminuye y también la de hemoglobina. Es por esto que mientras que en la mujer adulta el mínimo de hemoglobina en sangre es de 12.1 g/dL, en la mujer embarazada el mínimo es de 11 g/dL y cualquier valor menor a este podría considerarse anemia en el embarazo. Para saber si tienes anemia, el médico enviará un examen de sangre en el cual saldrá la concentración de hemoglobina, se lee como Hb y la unidad está en gramos por decilitros (g/dL).
Si bien la anemia es muy común en la embarazada, sus signos y síntomas son muy fáciles de confundir con los del embarazo (mareo, palidez, náuseas, etc,). pero es importante combatirla/evitarla ya que más allá de los malestares, existe un incremento del riesgo tanto para ella como para su hijo, como complicaciones hemorrágicas durante el embarazo, niños con bajo peso al nacer o bien mayor número de enfermedades neonatales. Es importante que durante el embarazo la mujer tome un suplemento multivitamínico prenatal, y si el ginecólogo lo indica, un suplemento de hierro (obligatorio en caso de anemia). Una buena alimentación es básica para tener un buen embarazo y evitar padecer de anemia o recuperarse más rápido de ésta, en especial porque las necesidades de hierro pueden aumentar en el segundo semestre aproximadamente cinco veces y en el tercer semestre aproximadamente ocho veces los requerimientos del pre-embarazo. (Ver Requerimientos de Hierro) Lo más lógico, entonces, es comer alimentos que no sólo sean ricos en hierro, sino que éste sea fácil de absorber. La regla más sencilla para saber si un alimento lo es es preguntar dos cosas: 1.¿Es rojo? Y 2. ¿Es de origen animal? 1.¿Por qué animal? Lo que sucede es que, si bien hay hierro de origen vegetal, este es hierro "no hem" y el hierro en nuestro cuerpo es hierro hem, entonces si consumimos hierro hem (de origen animal) el cuerpo puede aprovecharlo mejor y en más cantidad. Es por esto que si bien, un producto de orgine vegetal puede tener más hierro, la absorción y uso de éste es mucho más baja que el de uno de origen animal. 2.¿Por qué rojo? La hemoglobina es la que le da el color rojo a la sangre, entonces las partes del animal que contienen hierro son rojas (sangrecita, morcilla, carne). Las patas, por ejemplo, no lo son, la leche tampoco. Rompen la regla la yema de huevo y pescados como las sardinas y el atún. Alimentos ricos en hierro de origen animal: Hígado, sangrecita, morcillas, ostras*, arenque, sartdinas, pescados, yema de huevo*, carnes rojas. Alimentos ricos en hierro de origen vegetal: cacao en polvo, garbanzos, lentejas, habas, semillas y harina de trigo (ya que por ley viene enriquecida con hierro). La regla básica es no consumir el suplemento de hierro ni alimentos ricos en hierro con: cafeína (gaseosa negra, café, té, chocolate. etc.), alimentos ricos en calcio (como la leche, queso, yogurt, etc.), fitatos y fibras (que se encuentran en verduras como espinaca) . La cafeína inhibe la absorción de hierro, el calcio se "une" al hierro y al final no aprovechas ninguno y la fibra hace que no se absorba. Estos alimentos puedes consumirlos pero no en la misma comida que el alimento rico me hierro. Un detalle a comentar es que los glóbulos rojos "viven" 120 días, así que así cambies la dieta y tomes el suplemento, el tomar nuevos exámenes antes de este tiempo no arrojarán resultados diferentes. |
Sígueme en
MBA Lic. Martha NevesMBA Licenciada en Nutrición con más de 19 años de experiencia directa con niños, empresaria, docente universitaria y mamá. #LactanciaMaterna #Colecho #Porteo
Categories
Todo
Archives
Agosto 2022
|